Varios empleados, algunos con patologías de salud importante y otros con situaciones familiares complicadas, llevan meses pidiendo el traslado a un centro de trabajo más cercano a su domicilio para poder aliviar el sufrimiento en los casos de salud, y conciliar la vida familiar y laboral en los casos, sobre todo, de hijos pequeños.
Pero pasan las semanas y los meses, incluso los años, y estos traslados no se producen derivando, muchas veces, en bajas por estrés, agotamiento, ansiedad...
Estas situaciones, normalmente justificadas con informes médicos del empleado, en lugar de servir para resolver el problema parece que lleven a estancarse aún más. Y, sorprendentemente, los traslados ofrecidos a estas personas a menudo no responden a sus necesidades y sólo pretenden cubrir las necesidades puntuales de la empresa.
Hay que denunciar con contundencia estos hechos, no son casos aislados y están creando mucho
sufrimiento entre compañeros y compañeras. Es lamentable que desde TyC no sean capaces de resolver estas situaciones, indicando a menudo al empleado que los cambios entre DT, por ejemplo, son casi imposibles.
Desde el SEC no nos tragamos esta historia: el Banco insiste en decir que en algunos territorios sobran empleados y someter a la plantilla a una situación de malestar y agotamiento, es la mejor manera de encontrar candidatos a abandonar la entidad con medidas aparentemente voluntarias.
El Banco, con sus políticas de Recursos Humanos, actúa en contra de todo el discurso oficial que vende tanto interna como externamente: no escucha a los empleados ni para los traslados ni para su promoción (cuando a alguien le interesa una plaza del Apúntate nunca es el candidato ideal, pero en cambio se presiona a los empleados para que apunten a lo que sea porque si no representa que no les interesa promocionar).
Ni los mejores Acuerdos de Conciliación de la Vida Familiar y Laboral, de Igualdad o de prevención sirven de nada si detrás de las intenciones no hay una voluntad real de resolver estas problemáticas y unos responsables dispuestos a defenderlas.
| Des del SEC, desde la conciencia de que gestionar equipos de personas es complicado, pedimos al Banco que actúe teniendo en cuenta que tiene en sus manos también el bienestar y la felicidad de los empleados dentro del ámbito laboral y que eso afecta directamente en su implicación. Habría que revisar a fondo la política de RRHH y enfocarla a buscar el encaje del empleado con su puesto de trabajo, tanto en lo relacionado con la situación geográfica como con la función. |
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